¿Está Jesús en tu corazón?

11.03.2015 01:37

"¿JESÚS ESTA EN TU CORAZÓN?"

-"Mañana en la mañana...," -el cirujano explicaba a un niño: "Abriré tu corazón..."

El niño interrumpió: "Usted encontrará a Jesús ahí".

El cirujano se quedó mirándolo, y continuó: "Cortaré una pared de tu corazón para poder ver el daño completo en tu corazón..."

"Pero cuando usted abra mi corazón, usted encontrará a Jesús ahí".

El cirujano volteó a ver a los padres, quienes estaban sentados tranquilamente: "Cuando ya haya visto todo el daño ahí, planearemos lo que sigue, ya con tu corazón abierto".

"Pero Ud. encontrará a Jesús en mi corazón. La biblia lo dice bien claro, que Él vive ahí.

Las alabanzas todas, dicen que Él vive ahí... Usted lo encontrará en mi corazón".

El cirujano pensó que era suficiente: "Te diré que encontraré en tu corazón. Encontraré músculo dañado, baja respuesta de glóbulos rojos y debilidad en las paredes y vaso. Y me daré cuenta si te podemos ayudar".  Bien, pero usted encontrará a Jesús ahí también. Es Su hogar, El vive ahí, siempre está conmigo".

El cirujano se fue...; se sentó en su oficina, se puso a grabar 

en una grabadora sus estudios previos a la cirugía: "...Aorta dañada, vena pulmonar dañada, degeneración muscular cardíaca masiva, sin posibilidades de trasplante, difícilmente curable.

Terapia: Analgésicos y reposo absoluto.  Pronóstico: -Tomó una pausa-, "muerte dentro del primer año".  Detuvo la grabadora. "Pero tengo algo más que decir":

"¿Por qué?", -preguntó en voz alta-. "¿Por qué le hiciste ésto a él? Tú lo pusiste aquí; tú lo pusiste en este dolor y lo has sentenciado a una muerte temprana. ¿Por qué?"

El Señor le contestó y le dijo: "El niño, mi oveja, no pertenecerá a tu rebaño jamás, porque él es parte de mi rebaño, y conmigo siempre estará toda la eternidad.

Aquí en el Cielo, en mi rebaño sagrado, él no sentirá ningún dolor, y será confortado de una manera inimaginable para ti o cualquiera, así que es imposible que tengas la menor idea de lo que voy a hacer...".

Sus padres un día se unirán a él aquí, y conocerán la paz y armonía juntos en mi reino, y mi rebaño continuará creciendo". El cirujano empezó a llorar fuertemente, pero le dio una gran tristeza; no entendía.

-"Tú creaste ese muchacho y también su corazón y morirá en meses. ¿Por qué?"

El Señor contestó: "El niño, mi oveja, ya es tiempo que regrese a su rebaño, porque su tarea en la tierra ya la cumplió.

Hace algunos años, envié una oveja mía también, para que ayudara a sus hermanos; Le di dones de doctor, pero con tanta ciencia se olvidó de su Creador. Así que envié a mi oveja..., el niño enfermo, no para perderlo en los rebaños de humanos perdidos; al contrario, regresa a mí, y me trajo a mi oveja perdida  a mí también".

El cirujano lloró..., lloró...., y lloró.

Después de la cirugía, el cirujano se sienta al lado de la cama del niño, y los padres del niño lo hacen en frente del médico.

El niño despertó, y rápido murmurando, preguntó:

"¿Abrió mi corazón?"

"Si," dijo el cirujano.

"¿Qué encontró?" preguntó el niño.

"Tenías razón, encontré a Jesús ahí", dijo el cirujano.